Imagina tener que rezar a oscuras y saber que nada impedirá que el Sol vuelva a salir de nuevo mañana, cegador y asesino, y prenda tu vida en llamas.
Cerrar los ojos y ni aún así conseguir quedarte a oscuras.
Rezar por no gritarle a un dios en el que no crees.
Amar la noche y bendecir las fiestas sin honrarar a tu padre y a tu madre..
No hay comentarios:
Publicar un comentario